1. No tener objetivos claros
“Vender más” no es un objetivo, es una intención. Hay que poner metas que se puedan medir y, especialmente, que se puedan cumplir. Hay que ser ambiciosos pero no caer en querer imposibilidades.
2. No establecer un presupuesto
Sin un presupuesto definido por áreas en lo que se invertirá en marketing y publicidad. En esta economía que no es la más favorable se debe cuidar cada peso y gastarlo correctamente.
3. Confiar en socios no profesionales
Un error común, especialmente de las empresas que inician, es creer en publicistas o “expertos” en marketing que ofrecen soluciones milagrosas a precios ridículamente bajos. Este tipo de negocios no fructifica.
4. Elegir los medios inadecuados
La publicidad tradicional y el marketing digital cuentan con decenas de opciones diferentes para llevar el mensaje a los consumidores. Hay que hacer un buen plan de medios para llegar a los consumidores específicos.
Fuente: Mercado2.0