7 hábitos de las personas altamente productivas


1. Trabaja por objetivos

Elabora una lista de tareas para que te visualices tus actividades en el día. Divide el trabajo en partes pequeñas hasta tareas específicas para que puedas realizar tu labor en unas pocas horas o, incluso, en menos tiempo.

2. No realices múltiples tareas a la vez

Esto no funciona porque al final te aturdas con tanta actividad. Al realizar muchas tareas, tu coeficiente intelectual se reduce en 10 puntos promedio, en el caso de los hombres baja 15 puntos, mientras que las mujeres sólo disminuyen en 5 puntos.

3. Elimina las distracciones

Cierra la puerta, pone un cartel, apaga el teléfono, cierra el correo electrónico y la mensajería instantánea. Anda a un lugar tranquilo y céntrate en completar tu tarea.

4. Programa tu correo electrónico

Revisa dos o tres veces al día tu email, ya que chequearlo constantemente durante todo el día te desconcentra y mata tu productividad.

5. Usa el teléfono

El correo electrónico no es adecuado para realizar conversaciones. No respondas más de dos veces a un e-mail, sino que mejor levanta el teléfono y llama a esa persona.

6. Trabaja en tu propia agenda

Establecer los objetivos prioritarios para el día y el resto de la semana.

7. Trabaja en intervalos de 60 a 90 minutos

El cerebro gasta mayor cantidad de glucosa que cualquier otra actividad física y, por lo general, disminuye después de 60 a 90 minutos. Pasado este tiempo, tómate un descanso, da un paseo, tómate un aperitivo y hace algo completamente distinto a tu labor. Eso significa que necesitas una hora adicional para las pausas, sin incluir el almuerzo.

Fuente: http://bit.ly/vcSeWT 

El grado de satisfacción laboral afecta la calidad del sueño

 El grado de satisfacción laboral afecta a la calidad del sueño, según revela un estudio desarrollado por un grupo de investigadores británicos de la Universidad de Surrey, que el 33 por ciento de los empleados insatisfechos con su trabajo presenta desórdenes del sueño, frente al 18 por ciento que quienes se encuentran conformes con su situación laboral.

Asimismo, de la investigación se desprende que los asalariados y trabajadores autónomos disfrutan de un sueño "mucho más reparador" que quienes están desempleados.

De hecho, los investigadores aseguran que el 40 por cienpo de las personas que están en el paro tienen más dificultades de conciliar el sueño y de no despertarse a lo largo de la noche que quienes tienes trabajo.

El tipo de trabajo de una persona también influye la calidad del sueño pues, según señala el estudio, quienes ejercen profesiones liberales duermen mejor que el resto de los profesionales.

Por otra parte, sólo el 6 por ciento de los directivos disfruta de más de ocho horas de sueño por noche (lo que recomiendan los expertos), frente al 11 por ciento de quienes no tienen responsabilidades de gestión.

Este análisis, realizado sobre los datos recabados en 14.000 hogares del Reino Unido, apunta además que las personas con mayores niveles de educación y las que están casadas disfrutan también de un sueño de "más calidad".

"Teniendo en cuenta los vínculos entre la salud, el sueño y las circunstancias sociales y económicas podemos concluir además que las personas más desfavorecidas o las que atraviesan problemas económicos tiene más problemas para conciliar el sueño, lo cual repercute de forma directa en su salud", explica la profesora de la Universidad de Surrey, Sara Arber.

LAS MUJERES TIENEN MÁS PROBLEMAS PARA DORMIR: Respecto a la diferencia por sexos, el estudio concluye que las mujeres son más propensas tener problemas para conciliar el sueño. Así, el 24 por ciento de ellas tardan una media de 30 minutos en dormirse tres o más noches a la semana, algo afecta al 18 por ciento de los hombres.

Por edades, estos trastornos afectan, durante tres o más noches a la semana, hasta los 25 años de edad, luego descienden ligeramente con la edad en los hombres con la edad pero, sin embargo, aumentan en el caso de las mujeres.

En relación con la medicación, el trabajo apunta que una de cada diez personas necesita tomar fármacos para dormir, tres o más noches a la semana. En concreto, el 9 por ciento de los hombres y el 10 por ciento de las mujeres.

Por su parte, el 25 por ciento de las mujeres y el 15 por ciento de los hombres afirman tomar medicación para dormir tres o más noches a la semana.

Fuente: http://bit.ly/vJY6uz

Etiqueta de Negocios

En México es de mala educación no contestar un saludo de mano, mientras que en China es mal visto entregar cierto tipo de regalos a tus socios comerciales.  Los japoneses no temen preguntar cuánto es tu salario, en tanto que en Egipto es muy común que los ejecutivos se abracen de forma afectuosa.
La globalización y la hiperconectividad que vivimos actualmente han permitido que hombres de negocios de puntos opuestos de la tierra puedan tener una relación de trabajo, sin embargo hay ocasiones en que las diferencias culturalaes pueden dificultar la relación entre los ejecutivos.
Rachel Zupek de la Fox School of Business de la Universidad de Temple en Filadelfia apunta que hay ciertas actitudes que se pueden tomar para reducir los malos entendidos origiandos por las distancias y los diferentes contextos socio-culturales de las personas en una relación de negocios.

Antes de ir a una reunión

1. Prepárate: investiga sobre el negocio y la etiqueta personal de cada país que deseas visitar. Compra un libro de viajes, consulta con personas que ya hayan ido y recuerda, el internet es tu amigo.
2. Conoce las frases más importantes: siempre es bueno manejar algunas frases en el idioma del país que visitarás ya que abre un puente entre las culturas y se ve como un buen intento por poner de tu parte para que el negocio fluya lo mejor posible. Piensa que los ejecutivos nativos apreciarán el gesto de la misma manera en que tú lo harías con un extranjero que visite México.
3. Sal con una buena actitud: recuerda que no importa de qué país vengas, tu cultura no es mejor ni superior a cualquier otra. Tampoco se trata de salir con un ánimo derrotista.
4. ¡Mézclate!: trata de participar con tus socios y evita que se note demasiado que eres extranjero. Habrá culturas que lo permitan mejor, como la occidental, pero siempre es bueno no pretender destacar por ser diferente.

El infame Jet Lag

Los cambios de horarios y el cansancio que generan las largas horas de vuelo pueden tener grandes efectos en tu cuerpo. Dana Persi de la agencia DP Image Consulting ofrece los siguientes cinco consejos para evitar que estos efectos se hagan presentes en medios de una reunión de negocios.
1. Trata de llegar un par de días antes para darle la oportunidad a tu cuerpo de adaptarse a los cambios horarios antes de las reuniones importantes.
2. Descansa lo suficiente antes del viaje para evitar que el jet lag se agudice por falta de sueño.
3. Bebe mucha agua para evitar la deshidratación que empeora los síntomas de la descompensación. Evita la cafeína y el alcohol para evitar agudizar los síntomas.
4. Duerme en el avión sólo si es de noche en tu destino, de lo contrario espera a llegar para dormir ahí.
5. Ajusta tu reloj al nuevo horario antes de salir. Una vez que llegues a tu destino, trata de dormir hasta la noche o toma siestas.

A donde fueres…

Hay millones de costumbres diferentes, pero hay ciertos puntos que conviene tener presentes al momento de hacer negocios internacionales.
1. Los roles de género: este es un punto fundamental no sólo en los negocios sino en todo viaje al extranjero. Hay países donde estos papeles pueden estar enraizados en una religión por lo que un error al respecto puede resultar muy ofensivo.
Por ejemplo, en el mundo árabe es obligatorio dar la mano en el mundo de los negocios, pero no se puede tocar a una mujer en traje sastre occidental. En India, hombres y mujeres no pueden tener contacto físico fuera de un saludo de manos, mientras que en Japón es mejor saludar de la manera tradicional puesto que las generaciones mayores no se sienten cómodas con más contacto con los ejecutivos más jóvenes.
2. Hablando de negocios: en Alemania por ejemplo es importante limitar las charlas de negocios a las salas de juntas, jamás se discuten durante una comida. Sin embargo esto está permitido en China, mientras no sea el principal tema de conversación.
3. Tarjetas de presentación: el intercambio de las tarjetas de presentación en Japón es un asunto casi ceremonial; se entregan con las dos manos y se debe examinar y admirar la tarjeta que se recibe, pues esto indica el grado de respeto que se le tiene a la persona. En Italia es mal visto intercambiar estos objetos en los eventos sociales, sólo se acepta en reuniones de negocios.
4. Alcohol: en Australia este tipo de bebidas debe evitarse en las reuniones de negocios, pero en Alemania, Italia y México es aceptable beber con moderación. En Francia se sugiere evitar el consumo de alcohol antes de las comidas o fumar mientras alguien más no ha acabado sus alimentos.
No se rechaza una oferta de vodka de un socio de negocios en Rusia, es una manera segura de estropear la relación.  Por otra parte, en Londres es normal salir a beber las noches de los viernes con los compañeros de negocios.
5. Regalos: recuerda que la norma universal es la calidad y si das objetos con el logotipo de tu empresa, debes procurar que sean discretos pero jamás des merchandising como obsequio en Grecia, España o Portugal. En China es de mala educación abrir un regalo frente a la persona que te lo dio, jamás deben darse en privado y nunca se aceptan paquetes envueltos en colores amarillo, blanco o negro porque simbolizan luto.  También debes evitar obsequiar tijeras o cuchillos, pues significan cortar lazos; los relojes o pañuelos, simbolizan funerales o muerte.

…Haz lo que vieres

Otros puntos importantes a considerar en la etiqueta de negocios internacionales son los siguientes según el portal Inc.
  • En el Medio Oriente o en Francia es común mantener contacto visual cuando se habla de negocios , mientras que en Gran Bretaña, se evita.
  • Si es tu costumbre de cruzar las piernas, ten cuidado de no mostrar las suelas de sus zapatos, apuntar a otros con tus pies  en una reunión de negocios en Tailandia. En este caso, así como en la India y algunos países de Oriente Medio, estos gestos con los pies se consideran ofensivos.
  • Poner tu pulgar arriba significa aprobación en occidente, en tanto que en Afganistán, Irán, Iraq y otras naciones islámicas es una ofensa terrible.
  • En Estados Unidos es poco común el contacto físico entre hombres de negocios pero los latinoamericanos suelen ser muy expresivos al tocar brazos y hombros de sus asociados.
  • La franqueza y la brevedad son valoradas en las discusiones con los australianos. Sin embargo ocurre lo contrario en Asia, donde la gente rara vez muestra ira y casi nunca dicen “no”; más bien, optan por un "tal vez" o "ya veremos".
  • En el Reino Unido, si un socio de negocios toca su nariz durante una discusión, no significa que usted tiene algo desagradable en el rostro, es una señal para mantener cierta información confidencial o secreto.
Fuente: Alto Nivel

Ahorro de papel en la oficina


Tanto las personas de manera individual como las empresas tienen muchas maneras de disminuir el consumo de papel de manera sencilla. En la mayor parte de las oficinas se podría reducir fácilmente un 20% el consumo de este material.

Piénsatelo dos veces antes de imprimir.

Es la regla de oro a la hora de reducir el consumo. Si es necesario que imprimas algo, hazlo por las dos caras de la hoja de papel. Es una manera muy sencilla de reducir el consumo a la mitad.

Es muy fácil dar la orden de impresión, pero también es un auténtico desperdicio. Se gasta demasiado papel imprimiendo mensajes de email con sólo una línea de texto o haciendo copias innecesarias de documentos. Herramientas informáticas para la impresión como Greenprint consiguen ahorrar toneladas de papel.

Las empresas deberían estudiar con cuidado sus necesidades antes de encargar la impresión de grandes cantidades de documentos informativos como folletos o informes anuales. No es inusual que cientos o miles de esas copias acaben en los almacenes de las empresas sin ser nunca usados.

Coloca carteles cerca de las fotocopiadoras o de las mesas de los empleados recordándoles que no malgasten papel

Utiliza frases que llamen la atención como “¿De verdad necesitas imprimir eso?” o “¿Sabes cuántas hojas de papel usaste el mes pasado?”.

Algunos trucos a la hora de imprimir.

  • Ya sea para imprimir o fotocopiar, utiliza las dos caras de las hojas.
  • Imprime sólo las páginas que necesitas, para eso está la función de “Imprimir lo seleccionado”
  • Aprovecha al máximo las páginas que has de imprimir bajando el tamaño de la fuente. Existen programas que permiten incrementar la capacidad de impresión de una impresora.
  • Visualiza previamente en pantalla lo que vas a imprimir para evitar errores en las copias.

Implementa sistemas para calcular el gasto en papel.

  • Crea sistemas que permitan a tus empleados calcular el consumo de papel del que son responsables cada uno de ellos durante un mes. A casi todas las personas le sorprende descubrir cuánto papel pueden llegar a utilizar. Esto les motivará para reducir su consumo.
  • Por otro lado, este sistema conseguirá que los trabajadores puedan ver el cambio en los resultados si deciden reducir el consumo. Una manera de promover esto sería creando una especie de concurso para ver quién es el que menos papel consume en un mes.

Fija los valores de impresión en los ordenadores.

  • Comprueba que las opciones de impresión estén fijadas para imprimir por las dos caras. Sólo debería imprimirse por una sola cara cuando sea estrictamente necesario.
  • Imprime por las dos caras las facturas, solicitudes, licencias y todos los demás documentos que se caracterizan por ocupar mucho espacio y ser los que más consumo de papel requieren en una empresa.
  • Si la impresora no permite imprimir por las dos caras, investiga si podría ser conectada a otra unidad que sí cuente con esa función.
  • Programa los ordenadores para que aparezca un mensaje de “Piénsatelo mejor” cada vez que el usuario pulse la orden de imprimir un documento.

Reduce la posibilidad de encargar más copias de las necesarias.

  • Realiza un análisis que identifique todas las ocasiones en las que tu empresa ha encargado muchas más copias de las necesarias. Esto servirá para replantearse el número de copias necesarias en el futuro y asegurarse de que lo encargado se ajusta a la demanda.
  • Publica el resultado de ese análisis en el tablón de anuncios de la oficina o en alguna publicación interna de la empresa.
  • Crea un cuestionario para todos los departamentos que se encargan de solicitar la impresión de anuarios, folletos o informes. Ese cuestionario debería incluir preguntas como:
    • ¿A cuántas personas o empresas va destinado el documento a imprimir? ¿Cuántas copias de seguridad se necesitan?
    • ¿Estás seguro de que los que van a recibir el documento necesitan una copia en papel o bastaría con enviárselo por correo electrónico o enlazarlos con la web correspondiente?
    • ¿Es necesario que se les envíe esa copia en papel aunque no la hayan pedido o sería posible esperar a que sea el destinatario quien la solicite?
    • ¿Necesitan copias para cada uno de los empleados o bastaría con que se dejara una en una zona común de la empresa o en el tablón de anuncios, por ejemplo?
    • ¿Cuántas copias en papel necesita y para qué son? ¿Para qué eventos o para qué propósitos concretos?
    • ¿Se encargarán personalmente de repartir o controlar la distribución de las copias encargadas?

Revisa con frecuencias las listas de distribución de su empresa.

  • Elimina los destinatarios anticuados o innecesarios.
  • Intentar reducir el número de copias a distintos destinatarios que son enviados a un mismo lugar o empresa.

Organiza reuniones sin papel.

  • Cuando se lleva a cabo una reunión, ¿es realmente necesario que todos los participantes cuenten con una copia en papel de todos los temas a tratar?
  • Anima a la gente a que use sus ordenadores portátiles durante las reuniones. Tanto para preparar los temas como para tomar notas.
  • Asegúrate de que todos los participantes tengan acceso a una versión electrónica del material necesario para la reunión. Pídele a los que usen sus portátiles que no impriman copias del material. Si es necesario, entrega material adicional durante la reunión o considera la posibilidad de entregarles a todos un CD donde esté grabada toda la información necesaria para la reunión.
  • Haz copias según se vayan necesitando y evita hacer grandes cantidades antes de tiempo. A menudo, las copias de material importante para la empresa quedan anticuadas demasiado deprisa y terminan por ser desechadas. Por eso conviene hacer las copias según se vayan necesitando.


¿Por qué fracasa el empowerment de tus empleados?

El empowerment o empoderamiento es un concepto que se ha logrado instalar en la mente de los directores empresariales con gran rapidez. La mayoría ha leído sobre esto, entiende el concepto, lo acepta y conoce los beneficios que se extraen al confiar en las decisiones que toman los empleados. Sin embargo, a la hora de implementarlo, son muy pocos los que proporcionan las condiciones para hacerlo.

Una paradoja que tiene su origen en el esquema autoritario que tienen las empresas tradicionales y una serie de errores que cometen los jefes durante el proceso.

Susan M. Heathfield, consultora especializada en recursos humanos y la gestión para la creación de puestos de trabajo, explicó a través de un artículo en About.com cuáles son las razones por las que fracasan las empresas en esta materia.

La última decisión

Hay gerentes que, si bien, dan el espacio para que los empleados tomen sus propias decisiones, no permiten que un proyecto fluya libremente, hasta que pase por sus manos. Ellos necesitan dar el último visto bueno y poner su firma, lo que termina por retrazar un trabajo que, de lo contrario, sería mucho más ágil.

Los procesos de empoderamiento no pueden completarse de la noche a la mañana, pero si la supervisión se extiende por mucho tiempo, también fallarás.
Intervención constante

Muchos jefes caen en el error de interferir continuamente en la toma de decisiones, sin darse cuenta. Esto no tiene nada que ver con la supervisión, sino con la desconfianza que termina por desilusionar a los empleados.

Si quieres empoderar a tus trabajadores de la forma correcta, debes entender que los directivos sólo actúan como guías al inicio del camino y en situaciones extremas.
Adiós a la responsabilidad

Lo contrario a estar constantemente encima de los empleados es entregar toda la responsabilidad y desligarse de los proyectos. Según Heathfield, que una persona ahora tenga poder de decisión no significa que el jefe dejará de asumir algún tipo de responsabilidad sobre el trabajo de los demás. En estos casos, la libertad termina por eliminar toda confianza y respeto, además de instalar una sensación de abandono en la mente del grupo.
No entienden

Si una persona entiende y conoce poco sobre un proyecto, difícilmente podrá aplicarlo bien. Esto sucede cuando los jefes no saben realmente lo que significa el empowerment hacia los empleados. Muchos tienen una vaga idea de los que significa, pero no entienden la totalidad de los cambios que deben realizar en las empresas para que se complete el círculo.

En el terreno equivocado

Otra parte de los jefes se jacta de entregar responsabilidades y dar libertad a sus empleados, sin saber que lo están haciendo en el terreno equivocado ¿Cómo? Heathfield explica que existe un grupo que pide cosas que ellos necesitan durante las reuniones y delegan tareas, pero que tienen relación con actividades extraprogramáticas y no con estrictamente con el trabajo.

Creen en el empowerment, pero no en las capacidades del empleado

De nada sirve tratar de instalar una filosofía de empoderamiento en la empresa, cuando no crees que tus empleados den la talla para ello. Lo primero es contar con gente de tu confianza, que te haya demostrado (siempre que se lo permitieras) sus capacidades de decisión.

Metas

Si no se proporcionas un marco estratégico, con metas que definan el éxito de una empresa, no podrás empoderar a tus empleados para que tomen sus propias decisiones. Los empleados necesitan de una dirección para saber lo que deben hacer.

Compensaciones y reconocimiento

Muchos intentos por inyectar una estrategia que permita más libertad a los empleados a la hora de tomar decisiones funcionan al comienzo, pero en el largo plazo fallan por la ausencia de compensaciones y elogios por parte de sus superiores. Las personas deben sentir que su esfuerzo es apreciado.
Sobrecarga de trabajo

Una cosa es dar libertad a los empleados para que se hagan cargo de las tareas y otra es sobrecargarlos con trabajo, a tal punto que no puedan cumplir con todo. Las gente quiere autonomía, no que te aproveches de ellos.

Acceso a la información

Pueden dar toda la libertad que necesita el grupo, pero si ellos no cuentan con toda la información que necesitan para realizar un trabajo de calidad, todo el esfuerzo será en vano. Los jefes deben entregar, tanto el acceso a los datos, como las oportunidades de aprendizaje suficientes para tomar buenas decisiones. Para Heathfield, “la información es la clave para el empoderamiento empleado con éxito”.

Fuente: http://bit.ly/sTV8tf